Es hora de confesarlo: Soy trans y he decidido salir del armario. Ya estoy harto del terrible conflicto que me supone representar un rol que no percibo como mío. Si dejan que tíos de pelo en pecho participen en campeonatos femeninos de natación sólo porque dicen sentirse tías, yo también exijo que se me juzgue por la forma en que me percibo y no por lo que realmente soy.